Una pareja extraña de jóvenes aparece en un pueblo de Colombia, nadie sabe de donde salieron, ni donde se alojaban, ni como desaparecieron después, tras regalarle una tabla Ouija a un grupo de niñas adolescentes, y enseñarles como usarla. Las jóvenes comenzaron a utilizarla como un rito secreto, y vivieron una experiencia extraña, como si los espíritus los rodearan cada vez que manejaban la ouija.
Ocho niñas colombianas sufrieron extraños síntomas tras practicar una sesión Ouija. Agresividad extrema, espuma en la boca todos los habitantes de Villarrica se pensaron que las pequeñas estaban poseídas por espíritus malignos.
Numerosos religiosos se ofrecieron a exorcizar a las niñas. Nadie en esta pequeña población colombiana puede olvidar un suceso que estigmatizó a toda su población. En vano un psiquiatra tratará de desprestigiar el suceso diabólico sin fundamentos.