La Casa Matusita es una vivienda de considerables dimensiones de dos pisos de altura. Lo curioso del relato es que al parecer sólo en el segundo piso es en donde ocurren estos fenomenos paranormales. Con el tiempo, sólo el primer piso ha sido ocupado por negocios o, como es en la actualidad, por una entidad bancaria, no obstante, nadie, parece atreverse a ocupar el segundo piso, y lo que lo han hecho, según los creyentes de esta leyenda de terror, no han salido con vida o han sufrido una serie de trastornos y tormentos.
La leyenda
por llamarla de algún modo, oficial de los creyentes, señala que en esta casa vivía un señor perverso quien maltrataba y abusaba de sus dos únicos sirvientes. Un día, cuando el dueño de la casa ofrecía un almuerzo a algunos invitados, los sirvientes decidieron cobrar venganza. Cuenta la leyenda de terror que los empleados colocaron una substancia en los alimentos, no para matar a su jefe, sino para ocasionarle trastornos mentales.