Ca´Dario es una de las casas embrujadas mas conocidas, tambien es conocida como la casa que mata, o la casa del diablo, ya que todos sus compradores al poco tiempo de adquirir la propiedad tuvieron una terrible y escalofriante final. La ciudad de por si es oscura, si uno pasea de noche por aquellas calles, no puede evitar estremecerse al ver un gato negro cruzando el puente del diablo, o al escuchar pasos cercanos mientras cruza presuroso por el callejón de los asesinos.
En sus cinco siglos de existencia se pueden contar con los dedos de una mano los dueños de ese palacioCa´Dario que han conseguido burlar a la maldición que pesa sobre ella y que han fallecido de muerte natural. Con razón los venecianos llaman a Ca’ Dario la casa que asesina.
Con esa fama a sus espaldas, y después de que su último propietario, el magnate italiano Raul Gardini se suicidara de un disparo en la sien en pleno escándalo de los procesos de corrupción de Manos Limpias, no es de extrañar que el fastuoso palacete renacentista llevara 10 años completamente abandonado. Estaba a la venta sí, pero no encontraba comprador.
Historia de las victimas de la casa que mata:
Ya en el siglo XV su primer dueño, el senador de la Serenissima Giovanni Dario sufrió en sus carnes la maldición de la mansión. Su hija Marieta, que junto a su marido Vincenzo Barbaro también residía en el palacio de marras, falleció de la angustia que le provocó saberse en la más absoluta ruina económica. Ca’ Dario pasó entonces a manos de la familia Barbaro, contra quien el palacio también dirigió su furia: uno de los herederos de esa noble estirpe fue asesinado en Candia.
Su siguiente propietario tampoco tuvo mucha suerte. Arbit Abbdoll, un rico comerciante armenio de diamantes, murió en la miseria más total, después de que perdiera su fortuna tras adquirir la casa maldita.
Un estudioso americano de Venecia llamado Radon Brown se suicidó entre los muros de Ca’ Dario junto a su compañero, después del escándalo que se desató al saberse que ambos hombres eran pareja.
El Palacio pasó entonces a manos del también estadounidense Charles Briggs, quien ante las habladurías sobre su homosexualidad abandonó Venecia y buscó refugio en México, donde su amante se quitó la vida.
Christopher Lambert, el mánager del grupo The Who, la compro. Aunque quizás le hubiera ido mejor si no lo hubiera hecho. Poco después de adquirirla se cayó por las escaleras de la casa londinense de su madre, muriendo en el acto.
El siguiente fue el hombre de negocios italiano Fabricio Ferrari quien, tras comprar la casa embrujadaCa’ Dario.
La casa pasa así a manos del financiero Raul Giardini, quien se quitó la vida en 1993, justo un día antes de que el grupo empresarial que dirigía se declarara en bancarrota. Desde entonces Ca’ Dario esta abandonada.